10 octubre 2023 Comunicado ACPP sobre la situación en Palestina e Israel: Condena a la violencia y llamado a la protección de los derechos humanos
En el contexto de los sucesos acontecidos en los últimos días en Palestina e Israel, donde Asamblea de Cooperación por la Paz lleva trabajando más de 30 años de la mano de socias locales palestinas e israelíes en defensa de los derechos humanos de la población palestina, el cumplimiento del derecho internacional y el derecho internacional humanitario, expresamos lo siguiente:
Condenamos enérgicamente el ataque indiscriminado de Hamas a la población civil israelí, incluyendo el asesinato de al menos 900 personas, entre ellos 260 asistentes a un festival, y la toma de al menos 130 rehenes. Este acto de extrema violencia debe ser condenado sin importar quién lo cometa. Es importante destacar que, según el derecho internacional humanitario y las resoluciones de las Naciones Unidas, se reconoce la legitimidad de la lucha de los pueblos por su independencia y la utilización de todos los medios disponibles, incluida la lucha armada, en el contexto de la lucha contra la colonialización, el apartheid y la ocupación extranjera. Sin embargo, es crucial enfatizar que, incluso en la legítima defensa de los pueblos, se deben respetar las normas del derecho internacional humanitario, que prohíben el ataque deliberado a civiles y la toma de rehenes[1]. Debemos ser capaces de rechazar los horribles ataques de Hamas contra civiles inocentes, como denunciamos incesantemente las graves injusticias y violencia que enfrenta la población palestina bajo la ocupación.
Asimismo, condenamos la subsiguiente acción militar del Estado de Israel en la Franja de Gaza, la cual constituye un acto de castigo colectivo contra la población civil palestina y un crimen de guerra según los tratados de Ginebra. Hasta la fecha de este comunicado, ha provocado la muerte de más de 770 personas, así como miles de heridos/as y más de 200,000 personas desplazadas de sus hogares debido a los ataques aéreos israelíes. Además, se ha interrumpido el suministro de agua y electricidad, y se ha impuesto un asedio total a la Franja, donde Israel ha bloqueado la entrada de alimentos, combustible y medicamentos, sin facilitar corredores humanitarios. Esta situación agrava profundamente una crisis humanitaria ya existente para la población de Gaza[2].
La población palestina lleva enfrentándose durante más de 50 años a la ocupación de su territorio por parte de Israel, con políticas de apartheid que vulneran los derechos humanos y el derecho internacional humanitario. La impunidad de Israel y su intento de anexión en Cisjordania han causado un aumento de la violencia en 2023, con 179 asesinatos y 7,829 personas heridas por las Fuerzas de la ocupación israelíes. También se han registrado 582 ataques de colonos ilegales en Cisjordania, forzando a más de mil palestinos a abandonar sus comunidades. Además, 1,264 palestinos/as están detenidos administrativamente, incluyendo más de 170 menores[3]. En Gaza, el bloqueo por tierra, mar y aire ha creado condiciones inhumanas para más de dos millones de habitantes, constituyendo un castigo colectivo que viola el derecho internacional.[4]
Como parte de un ejercicio de responsabilidad ante esta escalada de violencia sin precedentes cercanos, instamos a la Comunidad Internacional, los Estados, partidos políticos, medios de comunicación, organizaciones de la sociedad civil y personas en general a analizar la situación actual y, por consiguiente, a pronunciarse y a actuar en base a sus obligaciones y responsabilidades en el marco de los derechos humanos y del derecho internacional.
Ante esta situación, exigimos:
- Que las partes implicadas cesen de manera inmediata los ataques y que apuesten por la negociación como única solución. Es urgente frenar la escalada de violencia y garantizar la protección de la vida de civiles;
- Adoptar medidas concretas para garantizar la protección del pueblo palestino, especialmente en la Franja de Gaza, frente a los ataques israelíes, incluyendo el establecimiento de corredores humanitarios para el movimiento de personas y la entrega de materiales de primera necesidad;
- Reconocer y condenar la ocupación ilegal de Israel, el colonialismo y el régimen de apartheid como motores de las continuas oleadas de conflictos en el territorio;
- La retirada inmediata, incondicional y total de Israel del territorio palestino ocupado, en cumplimiento de todas las resoluciones de la ONU;
- El desmantelamiento del régimen de apartheid promovido por el Estado de Israel;
- Sancionar la ocupación ilegal, el apartheid y los actos de agresión de Israel mediante la aplicación de un embargo de armas, sanciones económicas y medidas contra las instituciones israelíes;
- Llevar a cabo un proceso político más amplio que logre poner fin a la ocupación, al apartheid y al bloqueo de Gaza. Un proceso que incluya a la sociedad civil de Palestina e Israel y que aborde las cuestiones relativas al estatus final, que incluyen el estatus de Jerusalén, los asentamientos ilegales israelíes, las fronteras, la seguridad, así como la libertad de movimiento de la población palestina y el derecho al retorno de las personas refugiadas.
[1] https://www.un.org/unispal/document/auto-insert-184195/
[2] Declaración del Coordinador Humanitario para el Territorio Palestino Ocupado, Lynn Hastings, sobre las hostilidades entre los grupos armados palestinos en la Franja de Gaza e Israel | Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas – Territorio Palestino Ocupado (ochaopt.org)