La revolución rural feminista

La revolución rural feminista

Las mujeres rurales vascas y palestinas están liderando proyectos de producción y consumo sostenibles, muchos de ellos con perspectiva agroecológica, y están construyendo redes que, como señala Nadia López Ruiz del colectivo de mujeres Etxaldeko Emakumeak, “pretenden ir despacio, porque quieren ir lejos”.

Proyectos que están provocando grandes cambios al abrir fisuras en el sistema patriarcal que invisibiliza su trabajo, limita su participación y carga sobre sus espaldas el peso de las labores del cuidado. “La sociedad pensaba que las mujeres éramos incapaces de gestionar el proyecto pero, después de un tiempo de trabajo, ese punto de vista cambió”, recuerda Amneh Mustfa de Creativity cooperative desde Palestina, un país en el que el trabajo en la tierra es una forma de resistencia frente a la ocupación. 

Aunque resulta evidente que la historia y el contexto de Palestina y Euskadi poco tienen que ver, los datos dan buena cuenta de una desigualdad que no conoce fronteras. Según la FAO*, en Palestina, 4 de cada 10 mujeres rurales realizan trabajo no remunerado. En Euskadi, cerca del 80% de las mujeres agricultoras y productoras vascas trabaja en producción, pero solo el 6% se ha dado de alta, según la profesora de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad Pública del País Vasco, Mirene Begiristain.

Conscientes del enorme reto que supone sacar adelante un proyecto sostenible y ecológico en este sector masculinizado que soporta la presión del mantra capitalista de la productividad, muchas mujeres han optado por sumar esfuerzos. “Hemos aprendido lo importante que es el asociacionismo. En los últimos años, las mujeres del ámbito rural se han asociado mucho”, destaca Begiristain.

En nuestra apuesta por conectar las realidades del Sur con el actual contexto de nuestro territorio y trabajar de lo local a lo global para conseguir una reflexión más completa por parte de la ciudadanía, BLB/ACPP y la principal organización social palestina en el campo del desarrollo rural y la agricultura, PARC, hemos querido apoyar la silenciada revolución que están llevando a cabo las mujeres rurales.

El proyecto “Ellas Deciden: Palestina-Gipuzkoa. Mujeres rurales y transformadoras”, financiado por la Diputación Foral de Gipuzkoa, nos ha permitido tender puentes y crear redes de sororidad entre las mujeres rurales. Charlas en institutos, catas de productos palestinos y vascos producidos en las cooperativas de mujeres, debates, un documental que entreteje los saberes de las mujeres rurales de Euskadi y Palestina, una manual de buenas prácticas…

Este proyecto que ahora concluye ha visibilizado y reconocido el trabajo y la apuesta de las mujeres rurales por un mundo más justo y sostenible. Mujeres rurales que como concluye Ioana Iñigez, de la red vasca de cooperativas y grupos de consumo ecológico Basherri Sarea, lo que tienen en común es, “el amor a la tierra”. ●

* http://www.fao.org/3/al807e/al807e00.pdf



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